Ser un arquitecto diseñador no solo se trata de tener habilidades técnicas y experiencia, también se trata de tener una metodología sólida y una capacidad para comunicar y vender tus ideas. A menudo, como arquitectos, tenemos ideas preconcebidas sobre cómo debería ser el diseño, pero es importante estar abiertos a nuevas ideas y enfoques, ya que las tendencias están cambiando y se está incorporando la inteligencia artificial al mundo profesional.
A veces, nuestros clientes tienen planificado hacer cosas imposibles, y como arquitectos, debemos ayudarles a aterrizar sus ideas y ofrecerles soluciones realistas y factibles que no estén en detrimento de nuestros honorarios o nuestro estilo de diseño, ya que la recesión económica, guerras y pandemias de este nuevo milenio estarán impactando en la forma en la cual concebimos un proceso de diseño.
Construir un proceso
Una de las claves para mantener nuestra vigencia es seguir una metodología sólida en el diseño, pero que podamos consolidar como un proceso que pueda ser eficiente con el tiempo. En grupo de arquitectura y urbanismo hemos establecido una base sólida de conocimientos, el cual establece sistemas de optimización de recursos y agilización de los procedimientos personalizándolos en cada persona que se acerca hacia nosotros. Esto incluye investigar y entender las necesidades y deseos de nuestros clientes, conocer el entorno mediante un análisis locacional e inmobiliario, comprendiendo las limitaciones del lugar donde se construirá el proyecto, y escuchar activamente a nuestros clientes. Uno de los hallazgos más simples pero importantes ha sido construir una comunicación fluida con los clientes, quienes hablan de sus sueños, posibilidades, experiencias de vida y forma en la que conciben el mundo, lo que nos da pauta a ofrecerles soluciones realistas y factibles.
Es importante para los arquitectos saber vender y defender sus ideas, del mismo modo que tú mismo no puedes confrontar a un médico sobre su diagnóstico, debemos mostrar la experticia y los conocimientos para establecer argumentos. A menudo, no recibimos enseñanza universitaria en cómo tratar a un cliente o cómo defender nuestras ideas de manera efectiva, y nos basamos en la experiencia, creando pruebas y errores que nunca terminan porque todas las personas somos diferentes y no será infalible ninguna técnica con el siguiente cliente.
"En grupo de arquitectura y urbanismo hemos establecido una base sólida de conocimientos, el cual establece sistemas de optimización de recursos y agilización de los procedimientos personalizándolos en cada persona que se acerca hacia nosotros"
Campos del conocimiento
La investigación y el aprendizaje en varios campos complementarios resulta esencial para atender las necesidades y deseos de nuestros clientes, especialmente usando nuevas herramientas como la inteligencia artificial y la educación en línea. ¿Cuáles serían esos campos de conocimiento?, debemos considerar estar actualizados en: negociación efectiva, desarrollo de negocios, nuevo software (o actualización de software), tendencias de diseño arquitectónico, finanzas, impuestos y normatividad. Y concluyendo, antes de diseñar, hay que investigar, estar preparados para después escuchar a nuestros clientes; es uno de los principios de Grupo de arquitectura y urbanismo.
Ante los nuevos retos, la experiencia no lo es todo. También requiere la metodología sólida, una capacidad para comunicar y vender tus ideas y una habilidad para tratar y defender tus ideas ante tus clientes. Sin estas habilidades, es fácil convertirse en un simple arquitecto más en el mundo del comodity: un arquitecto entre miles más.
Manuel Elihú
Comments