En 2014, tuve la satisfacción de trabajar en la Casa Valle del Sol, una vivienda de interés social ubicada en el Estado de México, Valle de Aragón, junto con el arquitecto Juan Carlos Moreno. El proyecto de remodelación se centró en renovar una vivienda con años de antigüedad, optimizando los espacios existentes para adaptarlos a las necesidades de los residentes y mostrando que, al realizar mejoras sutiles y económicas, es posible transformar el entorno en un hogar soñado.

La intervención principal se realizó en la planta superior, donde se diseñó un gimnasio con un baño compacto, empleando vigas de madera y láminas de policarbonato, lo que resultó en una estructura ligera que maximiza la entrada de luz natural y garantiza una ventilación adecuada, ideal para actividades físicas. Se utilizó una estructura de vigas de madera complementada con láminas de policarbonato, combinando resistencia y ligereza para maximizar la iluminación natural y ventilación del espacio. La combinación de materiales es acorde al espacio para el ejercicio, añadiendo un toque contemporáneo y equilibrado, convirtiendo el gimnasio en un área que invita al bienestar y la relajación.

En el patio trasero se diseñó un pequeño jardín con una pared verde equipada con estantes para vegetación, con plantas como albahaca y romero, que aportan un valor decorativo al espacio y ofrecen beneficios prácticos para la salud y la cocina. Este jardín complementa el diseño del hogar al integrar vegetación que enriquece el entorno y fomenta actividades prácticas y saludables para los residentes.

En la recámara principal, se diseñó un vestidor a medida, con closets y un espejo despejado, incrementando el almacenamiento y utilidad original. La cabecera de la cama con recubrimientos de madera en diversos espacios, como la sala y el comedor, añaden textura, creando una decoración refinada.

El mobiliario, con acabados en piel y madera, aporta calidez y renovación, destacando por su funcionalidad y estética. Estos materiales no solo embellecen el espacio, sino que ofrecen durabilidad y una sensación acogedora. Esta renovación demostró que incluso en viviendas de interés social es posible realizar mejoras accesibles que transformen áreas clave en espacios funcionales y diseñados, mejorando significativamente la calidad de vida de los residentes.

La Casa Valle del Sol ejemplifica cómo el trabajo de arquitectos y otros profesionales puede transformar una vivienda de interés social en un hogar funcional y acogedor, destacando la importancia de colaborar con expertos para realizar mejoras significativas y accesibles.